lunes, 20 de octubre de 2014

LA GRAN PATERA

Tu largo viaje para  llegar a Europa, es el desplazamiento hacia un un sueño vital ,  imposible, trascendental para la vida de habitantes de otros países de tu continente y símbolo para los tuyos. 

Día tras día,  piensas en la penosa travesía. ¿Como la harás? ¿ Quienes serán tus compañeros de navegación? ¿Tendrán tus mismos deseos y objetivos? ¿Llegarás?

Huyes  de la miseria, de los conflictos, de la tortura, de los señores de las guerra, de la hambruna, de la insalubridad, de una sanidad inexistente, de las epidemias, del analfabetismo instalado,de la falta de perspectivas, de la muerte.

Sin presente ni futuro, buscas las  condiciones mínimas para  considerarte y sentirte un ser humano, con o sin la declaración de tus derechos.

El primer mundo con su doble moral te necesita para perpetuarse. Te ofrece inspirar compasión  a  los habitantes de "países civilizados", a cambio recibes vejaciones por parte de sus gobiernos. 

Es la manifestación de un colonialismo perfumado que te considera un esclavo de caucho,de infinita elasticidad y sin redención. 

Exporta epidemias a tu continente, a veces incontroladas, solo combatibles con vacunas ya preparadas que venden sus laboratorios y compran las organizaciones supranacionales con pingües beneficios. El negocio está hecho.

Solo te queda una opción, dejar lo que no tienes y buscar tu destino en países  acomodados que ofrecen una aparente igualdad y oportunidades.

En el tránsito  sufres penurias y maltratos de funcionarios fieles a los gobernantes del los países, etapas de tu  éxodo obligado. 
Los flujos de personas en una sola dirección son frecuentes y en condiciones similares a la tuya. De los muertos y desaparecidos no hay inventario.

Si tienes éxito y llegas vivo al territorio que has deseado, tu nueva escala suele ser un país de las costas mediterráneas, como Italia o España.
Ejercen de  verdaderas fronteras geoestratégicas establecidas por el mundo  privilegiado y levantadas contra ti. Los países de recepción
-si sobrevives- te consideran apátrida, sin derechos, te hacinan en centros de internamiento (campos de concentración actualizados).

Tienes la sensación de que tu llegada ha dejado de ser noticia en estos países y pasa a ser un suceso no deseable. que a veces se convierte en tragedia. 


Los representantes del" club" de los poderosos. -países que marcan las reglas- situados generalmente en al centro y norte del, para ti, nuevo continente entonan "un mea culpa" para tranquilizar las conciencias de sus gobernados y la suya.







Nadie, nadie analiza los motivos de los desplazamientos 
obligados  -tu desplazamiento - y  sí  el origen de tu emigración va más allá de la búsqueda del bienestar individual.
  
Los seres humanos, por serlo,  aspiran a condiciones que permitan el progreso, en casos extremos arriesgando incluso la vida, como es tu caso, y prescinden de lo que poseen.

A "los países frontera" receptores de desahuciados se les asigna esta misión a cambio de gozar de ciertos privilegios temporalmente hasta que los habitantes sienten la situación interna incómoda, desfavorable y cuestionan la función estipulada .

España se ve relegada a ser una base de ocio barata, con instalación de hoteles y casinos, con camareras y camareros bien adiestrados, asalariados sumisos y disponibles a cualquier precio.
Los autóctonos pasan a la categoría de privilegiados, a la que tu esperas pertenecer

Algunos de los habitantes asumen que en el país es necesaria la investigación y verdaderos profesionales para asegurar un futuro independiente con creación de riqueza  -tu no eres consciente.

Para integrarte y regularizar tu situación quieres contribuir con tu esfuerzo a participar  en los factores productivos. 
La aportación a la riqueza es escasa, no hay valor añadido y está sometida a variables incontrolables.

En España,el turismo es una de las mayores riquezas, función de las crisis de los países del entorno y de las condiciones climáticas. El futuro está predeterminado por lo que algunos llaman el "IV Reich económico y financiero", que somete a países enteros, inclusos continentes, sin  intervención militar. 
Tu también eres víctima de esta coyuntura.


Te llegan rumores de cómo puedes contribuir a la riqueza que el  país produce en un año. 
Te ofrecen nuevas actividades manipuladas por "el club" para cosmetizar los datos estadísticos que conviene mostrar a terceros y así tú colaboras para mejorar los indicadores económicos. 

Para ello puedes 
desarrollar actividades ilegales (tráfico de drogas), ejercer la prostitución o favorecer la compra de armas (computa como inversión). Ocupaciones que han sido incorporadas  recientemente a las que miden la riqueza del país.

El fenómeno sistémico se convierte en una alarma silenciosa, sin destellos, para los que no quieren escuchar el clamor de los que excluidos por razones étnicas, políticas, culturales o de desigualdad.Tú perteneces a ese grupo.

Las diferencias se establecen mas allá de países y se instalan en continentes.

Piensas... ¿Qué puedes hacer?


Una patera, preparas una patera, la  jamás construida, de dimensiones descomunales -una gran patera-  con numerosa tripulación formada por desahuciados de varios continentes, con plazas ilimitadas, sin coste de pasaje para arribar a con seguridad a las costas próximas.


¿Será  el final o el principio de una  forma 
nueva de construir el mundo?



Javier Aragüés (Octubre 2014)




L

No hay comentarios: